Las autoridades municipales actuaron siguiendo lo que dicta la ordenanza municipal Nro 2724/20 en la que se prohíbe la circulación con caños de escapes libres, modificados en su forma de fábrica, defectuosos por uso o desgaste material.

La destrucción de los caños de escapes fue realizada luego de la decomisación de los mismos en los distintos controles realizados en distintos puntos de la ciudad por agentes de la GUM y con colaboración de la Gendarmería Nacional.

En esta oportunidad fueron 35 los caños de escape que destruyeron miembros de la Guardia Urbana Municipal con ayuda del personal de herrería del taller municipal en las instalaciones ubicadas en Barrio Loza. Luego, los desechos fueron depositados en el basural municipal para su traslado.